miércoles, 9 de junio de 2010

Parte II

Nunca dijimos que íbamos a pasarla bien, pero teníamos la esperanza, los tíos no querían que bebiéramos ni que fumáramos, me sigue pareciendo absurdo, que después de tanta pastilla no podamos; quisiera estar cerca de ella, aunque nunca la amé, quisiera estar con ella hoy.

Ahora que lo pienso, de vez en cuando, cuando siento ganas de llorar, es en ella en quien pienso, debe ser porque nunca la vi feliz ni fui capaz de ayudarla, deseo sentir interés por algo.

cadáveres

cadáveres son mis abuelos y tíos
que no me supieron criar de niño

cadáveres son mis amigas y sus primas
que aprecian más la danza que la escritura

cadáveres son mis manos y mis dedos
que no me tocan de la forma que debieran
que no son capaces de detener mi saliva
que no son fruto del espíritu santo